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El presidente Danilo Medina a sus 13 días de gobierno ha tomado medidas limitando acciones que muchos la consideraban extravagancia del protocolo del Palacio Nacional o del endiosamiento de la figura de un Presidente.
Medina, quien ha asumido su accionar de gobierno poniendo en primer plano el bienestar de la gente, ha logrado conquistar el reconocimiento hasta de la oposición por decisiones gubernamentales, sobre todo en lo que atañe a privilegios presidenciales.
El jefe del Estado ha reducido de manera considerable la escolta presidencial, así como dispuso que la silla que usa el jefe del Estado no sea trasladada de un lugar a otro cuando hay varias actividades.
"yo me sentaré en una de las sillas que hayan en la actividad", habría dicho a protocolo el mandatario Medina.
Asimismo, el presidente Medina habría prohibido la colocación en oficinas públicas y despachos de funcionarios de las foto con la figura del Presidente de la República.
En muchas oficinas se veían la imagen del Presidente con un tamaño mayor que la del padre de la Patria, Juan Pablo Duarte.
Otras de las medidas favorables y que ganaron el aprecio de la población fue la decisión de Medina de reducir las escoltas a funcionarios y, sobre todo, a civiles.
Estas decisiones con las medidas de austeridad mandan una señal positiva del nuevo gobierno y del presidente Medina, quien arrancó muy bien su mandato, aunque muchos le han criticado que haya confirmado a funcionarios del gobierno de Leonel Fernández.
Pero hay que reconocer que los ratificados son figuras fundamentales del Comité Político y que trabajaron para que ganara las elecciones.
De todos modos, Medina ha humanizado hasta ahora la figura presidencial. Pero estamos empezando y no es como se empieza sino como se termina.
Hay que darle al nuevo gobierno los tradicionales 100 días para que ejecute las acciones, aunque la oposición no le da tregua en las redes sociales y en declaraciones públicas.
El presidente Medina, quien todavía no ha completado su gabinete gubernamental, tiene entre sus planes de Estado priorizar las acciones del gobierno en los aspectos fundamentales en base a pactos fiscal, educación y electricidad.
En el caso del pacto fiscal, hablamos de una acuerdo con sectores sociales, que siempre resulta odioso por los inevitables tributos que se deben aplicar.
Había una reunión convocada para mañana para tratar con la sociedad ese tema, pero el gobierno lo pospuso según anunció Temístocles Montás, ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, y Simón Lizardo, ministro de Hacienda, y Luis Reyes, de director Presupuesto, alegando que consultarán con el FMI.
El Consejo Social y Económico (diálogo nacional), lo dirige monseñor Agripino Núñez Collado.
El presidente Danilo Medina a sus 13 días de gobierno ha tomado medidas limitando acciones que muchos la consideraban extravagancia del protocolo del Palacio Nacional o del endiosamiento de la figura de un Presidente.
Medina, quien ha asumido su accionar de gobierno poniendo en primer plano el bienestar de la gente, ha logrado conquistar el reconocimiento hasta de la oposición por decisiones gubernamentales, sobre todo en lo que atañe a privilegios presidenciales.
El jefe del Estado ha reducido de manera considerable la escolta presidencial, así como dispuso que la silla que usa el jefe del Estado no sea trasladada de un lugar a otro cuando hay varias actividades.
"yo me sentaré en una de las sillas que hayan en la actividad", habría dicho a protocolo el mandatario Medina.
Asimismo, el presidente Medina habría prohibido la colocación en oficinas públicas y despachos de funcionarios de las foto con la figura del Presidente de la República.
En muchas oficinas se veían la imagen del Presidente con un tamaño mayor que la del padre de la Patria, Juan Pablo Duarte.
Otras de las medidas favorables y que ganaron el aprecio de la población fue la decisión de Medina de reducir las escoltas a funcionarios y, sobre todo, a civiles.
Estas decisiones con las medidas de austeridad mandan una señal positiva del nuevo gobierno y del presidente Medina, quien arrancó muy bien su mandato, aunque muchos le han criticado que haya confirmado a funcionarios del gobierno de Leonel Fernández.
Pero hay que reconocer que los ratificados son figuras fundamentales del Comité Político y que trabajaron para que ganara las elecciones.
De todos modos, Medina ha humanizado hasta ahora la figura presidencial. Pero estamos empezando y no es como se empieza sino como se termina.
Hay que darle al nuevo gobierno los tradicionales 100 días para que ejecute las acciones, aunque la oposición no le da tregua en las redes sociales y en declaraciones públicas.
El presidente Medina, quien todavía no ha completado su gabinete gubernamental, tiene entre sus planes de Estado priorizar las acciones del gobierno en los aspectos fundamentales en base a pactos fiscal, educación y electricidad.
En el caso del pacto fiscal, hablamos de una acuerdo con sectores sociales, que siempre resulta odioso por los inevitables tributos que se deben aplicar.
Había una reunión convocada para mañana para tratar con la sociedad ese tema, pero el gobierno lo pospuso según anunció Temístocles Montás, ministro de Economía, Planificación y Desarrollo, y Simón Lizardo, ministro de Hacienda, y Luis Reyes, de director Presupuesto, alegando que consultarán con el FMI.
El Consejo Social y Económico (diálogo nacional), lo dirige monseñor Agripino Núñez Collado.
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