Wednesday, February 25, 2009

Al PRSC le irá bien con el Canciller”… y al PLD también.

Recientemente el presidente del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), ingeniero Federico Antún Batlle, declaró que a esa organización política le iría bien en las elecciones del 2012 si lleva al actual Canciller, Carlos Morales Troncoso como Candidato Presidencial.
Más que cualquier otra figura del reformismo tradicional, parecería que Morales Troncoso, con su larga experiencia de Estado, especialmente en su desempeño como vicepresidente de la República y su actual función a cargo de las relaciones exteriores del gobierno, surge como un fuerte candidato no solo a presidir el partido, sino para encabezar la boleta por la presidencia de la República por un PRSC con sus fuerzas reunificadas para las próximas elecciones presidenciales del 2012.
No solo es el parecer del actual Presidente del partido, sino que varias de sus figuras importantes han expresado en público y en privado su preferencia por el responsable de las relaciones internacionales del gobierno peledeísta. A lo interno del Partido Reformista Social Cristiano, parece existir un consenso para favorecer esta candidatura. Morales Troncoso tendría todo a su favor para conseguir, al menos, la nominación a la candidatura presidencial para las aun lejanas elecciones.
Desde el gobierno, el Presidente dijo en una oportunidad que veía favorablemente la reunificación del PRSC y no ha puesto ninguna objeción para que los antiguos dirigentes de ese partido que apoyaron su candidatura en el 2008 y forman parte de su gobierno, participen en los aprestos de reunificación que ha estado haciendo la dirigencia reformista. Salvo la expresión franca de Héctor Rodríguez Pimentel, quien dijo que solo estaría de acuerdo con una reunificación que aceptara al Presidente Leonel Fernández como líder único de la organización balaguerista, la mayoría de los ex dirigentes que ahora ocupan cargos importantes en el gobierno peledeísta, han favorecido la reunificación incondicional del partido con todos sus antiguos dirigentes en torno a una figura del propio partido.
No es muy disimulado el apoyo del Presidente Fernández al proyecto de reunificación reformista y esta simpatía no es un simple deseo por el fortalecimiento del sistema político dominicano con el resurgir de una tercera fuerza que alterne con su partido y el PRD. El interés del peledeísmo en la reunificación del reformismo se explica en una conveniencia particular hacia el futuro.
El Presidente estaría cifrando sus esperanzas en posibles alianzas con miras a las próximas dos elecciones. Por un lado, se habla de un acuerdo sobre las elecciones congresuales y municipales del 2010, mediante el cual se cederían algunas de esas candidaturas al reformismo en lugares donde el PLD, aunque tiene actualmente la representación, no tiene garantías de preservar senadurías, diputaciones o sindicaturas. Se contaría con mejores candidaturas del PRSC que serían comprometidas en una alianza pública o privada. Este acuerdo garantizaría el control del Congreso por el PLD, a cambio de ceder candidaturas en lugares donde el partido gobernante está más débil. La combinación con el Partido Reformista Social Cristiano tendría también en mira las elecciones presidenciales del 2012.
Aunque la Constitución le permita una nueva postulación al Presidente Leonel Fernández, él mismo ha dicho que no optará. Pero aun postulándose, apoyando a Danilo Medina o a cualquier otro candidato, es previsible que el desgaste político del gobierno afecte cualquier candidatura peledeísta. Esta hipótesis aleja la posibilidad de que el partido de gobierno pueda repetir una victoria en primera vuelta para las elecciones del 2012. Los esfuerzos por mantener el poder estarían centrados en una estrategia adecuada para lograrlo en la segunda fase de ese proceso electoral.
El Partido Revolucionario Dominicano (PRD), por la forma tan errática y poco efectiva como se ha conducido en la oposición, no parece capaz de capitalizar todos los yerros del gobierno y convertirse en una fuerza electoral con posibilidad para derrotar al PLD en primera vuelta en las próximas elecciones. Aun pudiendo superar la votación obtenida en el 2008, es improbable que el PRD supere los graves conflictos que afloran de nuevo entre sus principales fuerzas internas de manera que no afecten sus posibilidades electorales. Esto podría reflejarse sensiblemente tanto en las elecciones del próximo año como en las presidenciales del 2012. En el mejor de los casos, el PRD podría conseguir un primer lugar en la primera vuelta, pero sin obtener el triunfo.
Bajo la perspectiva actual, parece claro que el PRD tiene neutralizada la posibilidad de una alianza con el PRSC para una segunda vuelta electoral en ese año en vista de los estrechos vínculos que ha venido orquestando el gobierno con ese partido. El PRD tendría que empeñarse a fondo para ganar en segunda vuelta con su propia militancia y la posible ayuda de algunos aliados de poco peso electoral.
El PRSC, unificado en torno a su mejor candidatura, podría recuperar la capacidad electoral perdida en esta última década. Es indudable que esa candidatura puede ser la del Ingeniero Carlos Morales Troncoso. Muchos en su propio partido lo ven de ese modo. Obviamente que a él no le desagrada la idea y el gobierno se estaría frotando las manos alentando esa posibilidad tras bastidores.
Es obvio que la polarización de la fuerza electoral entre el PLD y el PRD, no desaparecería de un porrazo con los resultados de las elecciones del 2012. La obtención de un máximo 15 a 20% es el porcentaje al que puede aspirar el PRSC, esta votación garantizaría la recuperación de parte de la fuerza perdida en los últimos años, pero muy lejano del 50 más 1, necesario para considerar que esta organización podría aspirar por sí misma a ganar esas elecciones.
Sin embargo, la votación que puede obtener el PRSC, sí lo convertiría en factor determinante para la segunda vuelta. Ni tontos ni perezosos, los estrategas del PLD, conocen esta realidad y estarían apostando a contar con una alianza con esa organización con miras al segundo evento. Que el Ingeniero Carlos Morales Troncoso sea el candidato o líder principal del Partido Reformista, garantizaría esa alianza con el partido gobernante en lugar del PRD, ya que le ha servido como Canciller durante los últimos 4 años, teniendo un buen desempeño como funcionario y un excelente papel como aliado.
Esta coalición, no solo favorecería al PLD, sino también al propio PRSC. Por un lado, el grupo disidente que como aliado del gobierno ha disfrutado de los beneficios de esa alianza, continuaría en el poder. En la nueva circunstancia, los reformistas que mantuvieron la franquicia del partido, en el contexto de la unificación, y aliado al PLD, estarían también en el poder que ayudaron a mantener dentro del pacto realizado.
Parece que es el PRD a quien más puede perjudicar la reunificación del PRSC en torno a Carlos Morales Troncoso. Este partido debe procurar una unidad monolítica que le de la fuerza suficiente para enfrentar con éxito esa posible alianza que luce catastrófica para sus aspiraciones electorales.
El PRD tiene el gran reto de superar las rebatiñas de sus convenciones, candidaturas y tendencias. Si salvando estos inconvenientes no logra elegir el mejor candidato, unificar sus fuerzas en torno a él y neutralizar cualquier maniobra de los astutos peledeísta para mantenerse gobernando, aun sin Leonel Fernández como candidato, le sería difícil ganar unas elecciones. Tiene razón Antún Batlle, al PRSC le irá bien con el Canciller, pero al PLD le puede ir mejor; puede mantener el poder en las próximas elecciones.

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