POR ALBERTO CAMINERO
El Nacional
Una ex vicepresidenta del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC)
En otro orden, favorece que las nuevas autoridades de esa organización sean escogidas por consenso, ya que la celebración de un proceso eleccionario interno podría ocasionar más división en el PRSC.
La vicesíndica del distrito Nacional y presidenta del Movimiento Consenso Electoral Reformista (CER), Alexandra Izquierdo, dijo que el PRSC se ha caracterizado porque en sus procesos internos siempre surgen divisiones, y por eso es mejor evitar traumas y escoger esas nuevas autoridades por consenso”, señala Izquierdo.
Al evaluar la realidad de esa organización, Izquierdo ve con escepticismo que el PRSC vuelva a ser una opción de poder, debido que sus dirigentes anteponen sus intereses personales y de grupos por encima de los intereses de la organización.
“Veo muy pocas posibilidades, por no decir ninguna, de que el PRSC vuelva a recomponerse y ser una fuerza política con capacidad de alcanzar el poder”, proclamó la presidente del CER, que en las pasadas elecciones respaldó al Presidente Leonel Fernández.
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Manifestó que en esas circunstancias nadie querrá regresar al partido reformista, debido a que las bases han perdido la confianza en sus dirigentes y por eso los altos niveles de división que se registran en la organización.
Izquierdo considera que lo primero que debió procurar la dirigencia de esa organización fue la unidad del PRSC, antes de abocarse a celebrar cualquier proceso eleccionario interno.
Asimismo cree que la sorpresiva renuncia de Amable Aristy Castro a sus aspiraciones de dirigir la organización tiene el propósito de hacer abortar las primarias del próximo 23 de noviembre y perpetuar al presidente Federico Antún Batlle.
, licenciada Alexandra Izquierdo, rechazó que la verdadera intención de Aristy Castro sea procurar la unidad del PRSC, sino postergar la renovación de las autoridades para favorecer a Quique Antún que tiene intenciones de quedarse hasta marzo del 2009, cuando finaliza su mandato.
Estima que esas acciones le hacen más mal que bien al partido fundado por el extinto líder Joaquín Balaguer, que luego de las pasadas elecciones de mayo del presente año quedó muy mal parado tras obtener una de las votaciones más bajas en su historia.
Pronosticó que en esa organización no se celebrará convención para elegir las nuevas autoridades como se ha venido planteando, ya que el choque de intereses es más fuerte que la intención de algunos dirigentes reformistas de salvar esa organización.
Dijo que la unificación de ese partido se hace cada vez más incierta, debido a que los propios dirigentes reformistas no se tienen confianza y además tienen compromisos entre ellos que no están en capacidad de cumplir.
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