Por EMILIO ORTIZ
La Superintendencia de Bancos concluyó el proceso de liquidación de la Asociación Central de Ahorros y Préstamos, sin necesidad de que el Estado invirtiera dinero en el resarcimiento a los ahorrantes de la entidad, tanto pequeños, medianos como grandes.
La entidad dijo que en cumplimiento de la primera resolución de la Junta Monetaria, del 7 de noviembre del 2006, se procedió al proceso de disolución de la entidad financiera.
La entidad fue disuelta por carecer de la solvencia financiera necesaria para permanecer en el mercado cumpliendo los índices prudenciales.
También por infracciones a las disposiciones sobre concentración de riesgos y límites de crédito a grupos vinculados, no constitución de provisiones de la cartera de crédito según al Reglamento de Evaluación de Activos, como por la ausencia de controles internos y administrativos para realizar una gestión financiera que garantizara que los recursos de los ahorrantes pudieran ser honrados en el momento que los requirieran.
Al momento de la disolución, la Asociación Central de Ahorros y Préstamos poseía activos por RD$1,402.2 millones, distribuidos en 18.9% en fondos fisponibles, 30.1% en cartera de crédito, 5.5% en rendimientos por cobrar, 44.9% en bienes recibidos en recuperación de crédito, y 0.6% en otros activos. Tenía también pasivos por un monto de RD$1,301.0 millones de pesos, divididos en 3.24% en cuentas de ahorro, 61.75% en certificados financieros, 34.25% deuda directa en línea de crédito y 0.77% en otros pasivos.
El proceso de pago se inició pagándoles primero a todos los depositantes con ahorros menores a los RD$500 mil pesos, que en conjunto representaban el 98% de los ahorrantes (3,502 personas) y concentraban el 3.4% del total de los pasivos, equivalente a RD$28.6 millones de pesos.
Luego se procedió a pagar a los depositantes con ahorros superiores a los RD$500 mil. Según establece la Ley Monetaria y Financiera, se les honró hasta medio millón de pesos y posteriormente se les completó la totalidad de sus ahorros. Estos representaban el dos por ciento del total de los ahorrantes (76 personas y/o empresas), quienes concentraban RD$1,262.4 millones de pesos, equivalentes al 96.6% del total de los pasivos.
La superintendencia de Bancos citó como otro elemento innovador en ese proceso de disolución para las personas físicas y jurídicas que no validaron sus depósitos con montos entre los RD$500 y RD$100 mil pesos, se les abrió a sus nombres cuentas de ahorro en el Banco de Reservas, y los tendrán un plazo de seis meses para solicitar la devolución de su dinero.
El monto transferido para las aperturas de cuentas resultó ser RD$4.7 millones de pesos.
A todos los depositantes con ahorros superiores a los RD$500 mil pesos se les saldó en efectivo la totalidad de sus obligaciones, y sólo dos depositantes Banco de Reservas con RD$445.6 millones y Asociación Norteña de Ahorros y Préstamos con RD$168.5 millones, recibieron bienes de la entidad que fueron valorados a precio justo de mercado como compensación al pago de sus deudas.
La administración vigente al momento de la disolución de la Asociación Central de Ahorros y Préstamos absorbió un 17% del total de los pasivos, equivalente a RD$222.6 millones, entregando bienes de sus empresas vinculadas con los cuales se le pagó a Viníloca del Norte, que poseía igual cantidad en depósitos, lo que también facilitó la agilización del proceso.
También se infdormó que el Banco de Reservas adquirió la totalidad de la cartera al ganar la licitación pública efectuada. El monto total de la cartera subastada ascendía a RD$247.1 millones, pagando por dicha cartera RD$205.9 millones, con una tasa de descuento de un 20%.
