Alberto Caminero
La escasez de combustibles en las estaciones de gasolinas, por falta de suministro por parte de la Refinería de Petróleo, es un problema que debió ser previsto por las autoridades del gobierno, para evitarle al país una crisis nacional.
Pero creado el problema desde la semana pasada con el racionamiento de las gasolinas a las estaciones de servicios, los funcionarios responsables del área debieron asumir una distribución equilibrada para evitar que hoy las gasolineras estén desiertas y sin combustibles.
Lo que empeoró el problema fue la falta de información por parte del gobierno y las declaraciones interesadas de los detallistas de gasolinas, que ante el privilegio de las empresas Shel, Isla y Esso, que recibían el 75 por ciento del suministro, utilizaron la denuncia como arma.
El lío se agudizó cuando los choferes en avalancha acudieron a las estaciones a llenar sus tanques y en muchos casos empresas acapararon combustibles, lo que agotó las gasolinas.
Con previsión y medidas a tiempo nos hubiesemos evitados la crisis.
La Refinería informó que dos buques con petróleo llegarán mañana jueves al país, mientras el vicepresidente de la República, doctor Rafael Alburquerque, anunció una solución a la crisis del combustible para este viernes.
Mientras tanto, la economía del país se perjudica, pero sobre todo la de muchos trabajadores y empleados dominicanos.
