Saturday, January 03, 2009

El dilema tridimensional Reformista

Por Milton Olivo

Se tiene establecido que todo lo que nace: crece, se multiplica y muere. Los partidos políticos como organizaciones humanas, tienen la peculiaridad de que según el nivel de evolución de sus dirigentes, podrían estos prolongar su vida en el tiempo.
Hoy, que se habla de reunificación Reformista, es interesante tratar de decodificar su índole, su naturaleza e intereses que los mueve. Sin entrar en la lógica mercurial intrínseca colateral.

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Por un lado está la cúpula interna: desacreditada y rechazada por la militancia. Tratando de reciclarse y retardar la inevitable renovación. Por otro lado, los Reformistas funcionarios: por fortalecerse políticamente y legitimarse reconectándose con la fuente, sin la cual están condenados a erosionarse.

Por otro, el interés de su jefe político, el presidente de la República, de levantar al Partido Reformista, con el supra interés de evitar que el PRD monopolice la oposición y el descontento al gobierno, que puede reflejarse en una pérdida del Congreso en el 2010, con sus naturales consecuencias.

Frente a todos los anteriores está la dirigencia baja, media y alta, radicalmente e históricamente leal al Partido Reformista, sus valores, su historia y su líder. Esta dirigencia ha sido: burlada por la actual cúpula. Frustradas sus aspiraciones de triunfo en el pasado por la división protagonizada por los hoy funcionarios. Y disminuida por la labor de zapa del presidente comprando dirigentes para fortalecerse a expensa de disminuir el Partido Reformista.

En ese contexto: ¿Que representa la reunificación? Al contrario de otros, que ven un peligro, yo veo un reto una oportunidad. ¿Por qué? Porque por un lado el presidente buscara y facilitará recursos para ayudar que el Reformismo se levante hasta un punto, pero no tanto que pueda convertirse en opción de poder.

Por el otro, la cúpula actual tratará de lucrarse, reciclarse y perpetuarse, asociada con los Reformistas funcionarios. Y del otro lado, la dirigencia medularmente leal, deberá tratar de aprovechar la oportunidad de reunificarse, renovar y relanzar el partido.

Lo lindo es que a excepción del presidente –naturalmente-: reunificarse y relanzarse podría ser una aspiración de la mayor conveniencia para todos.

La verdad es, que difícilmente te pueda engañar, aquel de quien tu no confía. La estafa normalmente es resultado del abuso de confianza. Y como decían los mayores: "Guerra avisada no mata soldado".

Las cartas están sobre la mesa. Los jugadores son todos conocidos. Y los objetivos están definidos. Existen ventajas tangibles y ventajas intangibles.

Creo que en este juego, en esta ocasión aclarados los puntos, la dirigencia leal al partido está llamada a ganar por múltiples razones.

Ante los objetivos de unos y de otros, existe el arma del coto y del rechazo oportuno, si no se reivindican con nobleza.

Pero si le sumamos la frustración existente en el inconsciente colectivo por los gobiernos de los Liberales, y la esperanza depositada en los Reformistas por la gran obra de cuando fue gobierno, y si se da una generalizada y entusiasta decisión de la dirigencia de base y media por la reunificación, el partido Reformista -unificado- se levantará.

Porque la verdadera reunificación que hace falta es la de abajo. La de arriba, su importancia histórica, es que puede ser la chispa o detonante para impulsarla.

Estamos en la obligación de darnos y aprovechar la oportunidad. Claro, siempre alerta y hasta durmiendo, con un ojo abierto.

Consciente de que en la confianza está el peligro. Y asumiendo con responsabilidad una coyuntura histórica.

Y de última, lo que no se pueda resolver por el derecho, como hombres y adultos, resolverlo por la fuerza. No hay razón de tener que aguantarle estafa y engaño reiterado a nadie.

El tiempo es el mayor de los bienes porque es irrecuperable. Y quien nos roba nuestro tiempo, es como si nos robara nuestros bienes. Y quien te roba lo tuyo, le está robando a los tuyos. Asunto imperdonable.

La cultura de apoyo a los hombres de trabajo, el orden y la solidaridad del Reformismo en el gobierno, la patria lo requiere y demanda. Mas en estos tiempos de la Civilización de la Información, y crisis global.

Adelante Reformista por Dios y tus derechos, súmate a la reunificación. A paso de vencedores.

*El autor es Escritor y dirigente Reformista.
E-mail: milton.oilvo@gmail.com--

Muy cordialmente,

Milton Olivo

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