Hombres armados amordazan y asaltan comerciantes a plena luz del día

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Ladrones se llevan 40 mil pesos, cinco
cajas de whisky y muchos vodkas




Seis hombres armados de pistolas asaltaron al mediodía de hoy el Super Colmado Báez, en el sector El Millón, donde amordazaron a sus empleados, la esposa del dueño y los sobrinos del senador Amilcar Romero, peledeísta por San Francisco de Macorís, José Antonio y Anabel Romero, que estaban como clientes. El joven fue golpeado con la cacha de la pistola en la cabeza, por lo que fue necesario darla varios puntos. También golpearon al dependiente Alex García Mateo y al cliente Rafael Antonio Solano.
Los asaltantes, que llegaron en un carro Honda Civil Plateado, se robaron 40 mil pesos en efectivo, además de cinco cajas de whisky, 140 paquetes de cigarrillos, más de cien tarjetas de llamadas telefónicas, así como una cantidad indeterminada de vodka.
El dueño del colmado erber Báez dijo que con este lo han asaltado tres veces en menos de seis meses.
Su esposa Fiordaliza Abreu dijo que cuatro hombres entrataron a su colmado en la calle Caña Dulce, número 22, de El Millón, después de gritar que se trabaja de un asalto, la tiraron al suelo junto a los dependientes Alex García y Gerónimo Féliz, y en el suelo donde los amordazaron.
Explicó que varios clientes que llegaron en ese momento también corrieron igual suerte y que al dependiente Alex le dieron un maquinazo en la cabeza, pero no lo partieron. Dijo que ella en el momento que la bajaron, se dio un golpe en la frente.
manifestó que los desconocidos se llevaron siete celulares que los que tenían momentáneamente retenidos.
Dijo que cuatro entraron al colmado, pero que otros dos se quedaron frente al colmado con el vehículo encendido. El colmado está a cien metros donde reside un subsecretario de las Fuerzas Armadas, cuya residencia es custodiada por seis militares.
"Me tiraron el azúcar y el ace en el suelo para tomar los sacos y llenarlos de mercancías", explicó Báez, quien impotencia dijo que los negociantes están sin seguridad y que no sabe qué hacer si cerrar, porque la ganancia se los lleva el gobierno con los impuestos, la energía cara y lo que queda los "vienen a buscar los asaltantes".
"Vámonos rápidos, que estamos perdiendo tiempo", fueron las palabras de uno de los asaltantes antes de emprender huida con el dinero y las mercancías.
La Policía envió agentes de Robos, quienes tomaron evidencias y se la llevaron para investigarla.
Se quejaba Báez que está pensando cerrar, porque no hay dudas que no hay protección para los negocios, porque nos tienen en zozobra y asediados.